FRENTE DEMOCRÁTICO POPULAR DEL PERÚ
(FEDEP)
PRONUNCIAMIENTO
¿A QUIÉN BENEFICIA EL ESTADO DE SITIO, SEÑOR
HUMALA, A LOS POBLADORES DE ISLAY O LA TRANSACIONAL MINERA SOUTHER?
La
transnacional Southern Perú Copper Corporación, el 2014 comercializó sus
minerales en $ 5,787,700 millones, de los cuales $ 2,482,000 millones salieron
del Perú, (de las minas de Cuajone y Toquepala), reportando utilidades de
$1,332,000 millones, ganancias del mexicano German Larrea Mota-Velasco.
(Hildebrandt 22 mayo 2015). Esta minera gana $ 3,700 millones cada día,
equivalente a todo lo destinado en un año para el sector salud en nuestro país.
Esta empresa pretende iniciar las operaciones de su proyecto Tía María, en la
provincia de Islay, Arequipa.
Como
se sabe, el pueblo de Islay se ha puesto de pie contra este proyecto, al cual
ya ha rechazado varias veces. Ante esa oposición, el 22 de mayo último, el
gobierno “nacionalista” de Humala decretó el “estado de sitio” o “toque de
queda”, después del asesinato de un campesino de 55 años que protestaba en
defensa del líquido de la vida, el agua, y rechazaba la extracción de los
metales que contaminarán las tierras agrícolas de su valle, Cocachacra.
Esta
protesta no lo entiende ni lo entenderá el Sr. Humala, ni su primera dama, ni
sus ministros, que reciben un sueldo de 30,000 soles mensuales o 1,000 soles
diarios, aparte de los bonos y demás pagos administrativos, y regalos suntuosos
de la minería y del petróleo, y de la SNI. Tampoco lo entenderá el congreso
nacional, que al contrario exige “dar solución” a la protesta y aplauden el
“estado de sitio”. Ellos que viven, viajan y se divierten con el impuesto del
pueblo y las regalías de las mineras, con un sueldo mensual de 30,000 nuevos
soles, más gollerías, a cambio de ineficacia de sus leyes. Ellos que firmaron
el TLC entreguista a las transnacionales.
La
policía y el ejército, aparatos opresores del Estado, al servicio del gobierno
de los “nacionalistas” y de la Southern Perú Copper Corporation, han
recibido la tarea de reprimir a los pobladores de la provincia de Islay. Desde
luego, los generales y la plana mayor de estas instituciones reciben
jugosos sueldos, y son parte y defensores del sistema. Pero la mayoría de
policías y soldados son del pueblo, y viven en la postergación y el olvido,
sobre todo cuando sirven en las zonas rurales y la frontera. La prensa escrita,
radial, y la TV. están secuestradas al perfil del capitalismo y de los
gobiernos de turno, de la SNI y de los grupos de poder. El Comercio y la República no dicen nada sobre la verdad del problema entre el agro y la minería
en Islay. Sólo dos gladiadores de la pluma (Hildebrandt y Lévano), le abren
paso a la verdad. Y algunos malos dirigentes, entre ellos Julio Gutiérrez, le
puso precio a la huelga, utilizando la lucha para sus fines personales.
Todos
ellos creen que la dignidad se compra, que el agua se vende, que nuestra
soberanía se subasta, y que nuestro pueblo merece el infortunio y la miseria. Dice
el Sr. Ollanta: Se ha declarado el estado de sitio para darle “paz a los
pobladores”. ¿Para darle “paz” a los pobladores del valle del Tambo o para
someterlos por la fuerza de las armas a los intereses de una transnacional
minera? Dice el Sr. Humala: Sendero está presente. ¿Acaso eso no es
apología al terrorismo senderista con el fin de justificar el estado de sitio?
No señor Humala, una cosa fue el terrorismo senderista que destruía al país
como camino para que su presidente Gonzalo tome el poder, y otra es la lucha
del pueblo de Islay en defensa del agro contra una transnacional minera.
Sendero luminoso jamás lucho en beneficio de los campesinos, sólo los utilizó
(vía el terror) como carne de cañón en su plan genocida de tomar el poder. Es
un grave insulto pretender llamarles senderistas a los campesinos de Islay. ¿Y
qué dice Cipriani, a nombre de la iglesia católica? Este hombre repudiado por
los sectores más progresistas del país, menciona que “el gobierno ha tardado en
reprimir a estos revoltosos” que piensan que “están defendiendo un derecho”.
Así pone su cuota en la defensa de las mineras, para seguir recibiendo la
dádiva del canon minero, poniendo a la iglesia católica a servicio de los
poderosos.
Sr.
Humala le exigimos en nombre del pueblo peruano, de todos los que votaron por
usted porque nos prometió agro sí, minería no, retire a las FF.AA y policiales
del valle del Tambo, de Cocachacra, de la provincia de Islay. Ud. ni nadie
pueden imponer con la bota y con la bayoneta lo que un pueblo con razón y
justicia rechaza. No le imponga a sangre y fuego la explotación minera de La
Tapada y Tía María a favor de la Souther. No destruya los valles del Tambo. No
actué como una marioneta del capital. Recuerde que Ud. Prometió ¡agua si, mina
no! Y el pueblo votó por eso. Y ese es el mandato que le dio el voto popular y
que usted tiene que obedecer. Tenga un poco de dignidad y deje que el pueblo de
Cocachacra siga su destino: la producción de alimentos, para bienestar de la
zona sur del país.
¡ABAJO EL ESTADO DE SITIO EN
ISLAY- AREQUIPA!
¡QUE LAS BOTAS NO IMPONGAN LA MINERÍA AL VALLE DEL TAMBO!
¡LA AGRICULTURA ES VIDA, LA MINA
ES MUERTE!
¡27 Y 28 DE MAYO PARO DE MACRO REGIÓN
SUR!
¡9 DE JULIO DEL 2015, PARO
NACIONAL CÍVICO POPULAR!
CEN FEDEP- 23 DE MAYO 2015.