FRENTE DEMOCRÁTICO POPULAR DEL PERÚ
FEDEP
BALANCE ELECTORAL Y
NUESTRAS TAREAS
Por el Profesor
Walter Romero.
Secretario General
del FEDEP
En nuestro país se ha
realizado la primera vuelta de las Elecciones Generales 2016. Los resultados,
sorprendentes o no, y al margen de nuestros deseos y nuestra voluntad, son
resultados objetivos. Al conteo oficial
los votos validos dan el siguiente resultado: Keiko Fujimori
obtiene el 39.86 %, Pedro Pablo Kuczynski el 21.05 % y Verónica
Mendoza el 18.74 %. En cuanto al mapa electoral, con la excepción de Arequipa y
Cajamarca, el norte, centro y oriente fue ganada por Keiko Fujimori,
en tanto que el sur fue ganado por Verónica Mendoza.
Todo fenómeno tiene
que ser analizado en su integridad y explicado por sus causas. En eso
se tiene que ser riguroso. Sólo así se puede estar en capacidad para
influir en su desarrollo. Hagamos un intento.
1.- TRIUNFO DE LA
DERECHA.
De los diez partidos
que llegaron al final de la contienda, ocho son partidarios de mantener vigente
la actual Constitución, y dos propusieron su cambio. Visto así, los
partidos de la derecha, partidarios de la actual
Constitución, sumaron el 77.11% y los partidos de
izquierda, contrarios a la actual Constitución, sumaron el
22.89%.
Y como ya se ha señalado,
los dos partidos más votados son de la derecha: Fuerza Popular
de Keiko Fujimori (39.86%) y Peruanos por el cambio de Pedro Pablo
Kuczynski (21.05 %)
Geográficamente,
Lima, el norte, el centro y el oriente del país votaron preferentemente
por Keiko Fujimori, es decir, por la derecha.
2.- QUIEBRA DEL
"INDEPENDENTISMO".
Me refiero a la
quiebra de los "independientes" en general, y del
"nacionalismo" en particular.
De muchas cosas que
recuerdo de mi juventud, hay una canción que decía: "Si pueblo es el
obrero, pueblo ya no es el patrón. Si pueblo es el campesino, pueblo ya no es
el gamonal. Si pueblo es el soldado, pueblo ya no es el general. Si pueblo es
el sacerdote, pueblo ya no es el cardenal".
Hay que
decir pues que "había una vez" en el Perú cuando los partidos de
denominaban de derecha o de izquierda. Si estaban de acuerdo con el
"status quo" eran de derecha. Si estaban contra el "status
quo" y proponían su cambio eran de izquierda. Y punto. Hasta se hablaba de
"centro derecha" o "centro izquierda", por decir una
derecha o una izquierda moderada. El APRA se presentaba como
"izquierda", aunque siempre fue acusada por la izquierda de actuar
como el "felipillo" de la derecha.
Recuerdo que esto
terminó en 1990, Antes, entre 1980-1985, la derecha electoral representados por
Acción Popular y el PPC había entrado en crisis, y entre 1985-1990 el APRA y la
izquierda habían entrado en crisis. En 1990 aparece un movimiento
"independiente" liderado por un descendiente de japoneses que con el
slogan "Honradez, tecnología y trabajo" se apodera del espectro
político peruano: Cambio 90.
Bueno, luego apareció
otro movimiento "independiente", esta vez liderado por un candidato
de origen andino que se hacía llamar "el Cholo de Cabana": Perú
Posible.
Luego apareció otro
movimiento "independiente" liderado por un militar: El Partido
Nacionalista. Con el nacionalismo el "independentismo" llegó a su
máximo nivel teórico: "Ni derecha ni izquierda, ni los de arriba ni los de
abajo; el nacionalismo representa a la nación". Nada más falso. El nacionalismo, bajo esa fachada, ha
defendido a la derecha, es decir, a los de arriba. Pero no se puede obviar
señalar que el nacionalismo apareció como un movimiento de izquierda, gracias
al periódico "Ollanta" que editaba Antauro Humala. Por ello Ollanta
Humala, con polo rojo, conmueve al país y gana la primera vuelta en las
elecciones de 2006. Pero, acusado de pro terrorista, pierde la segunda vuelta.
Para las elecciones de 2011, Ollanta se presenta ya con polo blanco, con el
cuento que "no es de izquierda, sino es nacionalista". Y gana la
primera vuelta con "el programa de la gran transformación", que
cambia para la segunda vuelta, por una "hoja de ruta" en el cual se
abandona todos los cambios propuestos. Así el nacionalismo gana en primera
vuelta con apoyo de la izquierda y gana la segunda vuelta con apoyo de la
izquierda y parte de la derecha. Y en el poder era imposible representar a
ambos, y decidió representar los intereses de la derecha.
El mérito de Humala
es que con su crisis puso fin al cuento del "independentismo". O se
es de derecha o se es de izquierda. La derecha ya no podía seguir disfrazándose
de "independiente", y la izquierda tenía que reorganizarse y salir al
frente, y dejar de apoyar a los "independientes" bajo el supuesto de
"apoyar al mal menor".
3.- RESURGIMIENTO DE
LA IZQUIERDA.
En las Elecciones
Generales de 2006, las tres listas de la izquierda, entonces encabezadas por
Alberto Moreno (Movimiento Nueva Izquierda), Javier Diez Canseco (Partido
Socialista del Perú) y Susana Villarán (Concertación Descentralista), en
conjunto no llegaron ni al 1% de la votación. Y puede asegurarse que la
izquierda peruana en las Elecciones Generales de 2011
fue absorbida por el nacionalismo.
Esto significaba una
literal desaparición de la izquierda, luego que en la
Asamblea Constituyente (1978-1980) tuviera 28 asambleístas y en el
Congreso de la República (1985-1990) tuviera nada menos que 65
parlamentarios.
Esa desaparecida
izquierda electoral ha reaparecido, y esta vez ha logrado el tercer lugar a
nivel presidencial, con un respetable 18.74 %, y en el Congreso de la República
tendrá unos 20 parlamentarios y será la segunda fuerza política . Es más, hipotéticamente, si Verónica
Mendoza y Gregorio Santos se hubieran juntado, estos momentos la
izquierda estaría ocupando el segundo lugar y pasando a la segunda
vuelta. Este momento, este supuesto es una simple especulación, pero
ojala en el futuro próximo sirva de una gran lección. No es culpa del electorado que la izquierda no
se una y disperse su votación.
Este parcial pero muy
importante éxito se debe a múltiples factores. Veamos: a) El principal factor
es la existencia de un sector de izquierda en el electorado peruano, que
ante la falta de liderazgo, desde 1990 se estaba limitando a
votar "por el mal menor". b) Otro factor es la existencia de un
puñado de hombres decididos a reimpulsar la izquierda en el Perú, En Lima
rescato la permanente y persistente labor de la Coordinadora Político
Social (CPS), y en Junín, la insistente labor de un puñado de hombres y
mujeres, "contra viento y marea", impulsando hace mucho tiempo el
desarrollo del Frente Amplio. c) Otro factor muy valioso es la existencia del
Frente Amplio, como organización política inscrita en el JNE, con una actitud
de puertas abiertas a otras organizaciones políticas de izquierda no inscritas.
En este caso, esto es un indudable mérito que hay que reconocerle a Marco
Arana. d) Finalmente, considero que otro factor importante fue la aparición de
Verónica Mendoza, una candidata nueva y joven, y la simpatía que logró su
personalidad en el pueblo peruano.
Desde luego que
hay otros factores a tomarse en cuenta, como el desgaste
del toledismo, del alanismo y el ollantismo. Es fijo que
muchos que antes votaron por Toledo, Alan y Ollanta hoy votaron por
Verónica. Desde luego también debe tomarse en cuenta el desgaste de otros
partidos tradicionales y "colectivos políticos" de última hora, y sus
líderes, como el PC, Patria Roja, Fuerza Social y Ciudadanos por el
Cambio. Y algo de razón también tienen quienes consideran que Verónica
tuvo la "suerte" que Acuña fue retirado de la contienda y Guzmán
no fue inscrito. De hecho, Acuña y Guzmán le hubieran quitado algunos
votos.
Otro factor, y muy
importante y al cual no se debe perder de vista es el desgaste de la interesada
confusión de izquierda y terrorismo como si fueran la misma cosa, en un buen
sector de la población. Y por ello no debe sorprender el triunfo
de Verónica Mendoza, en plena avalancha de la derecha, con un mensaje
inconfundible de izquierda, en Huancavelica (53.0%), Ayacucho (52.4%)
y Apurímac (50.1%), las tres regiones que fueron las más
convulsionadas por el terrorismo. Mientras en otras regiones acusar a la
izquierda de “terrorista” otorga “muy buenos resultados” para la
derecha, en esas tres regiones que por experiencia propia saben
distinguir muy bien qué fue el terrorismo criminal de sendero
luminoso y qué es el Frente Amplio, un partido de izquierda que encarna
sus legítimas aspiraciones, y es por ello que sin dudas ni temores,
le brindaron su masivo apoyo.
Y desde luego, las
muy buenas noticias que nos llegan de la nueva realidad económica y social de
Bolivia de Evo Morales también han contribuido
al resurgimiento de la izquierda en el Perú. En suma, la
izquierda ganó en Cajamarca y el sur del Perú.
4.- PRIMACÍA DE LAS
MUJERES.-
Aunque puede sonar a
irrelevante y tener más sabor a anécdota, debe tenerse en cuenta que dos
candidatas mujeres obtuvieron más votación que ocho candidatos varones. Keiko
Fujimori y Verónica Mendoza casi bordean el 60% del electorado, mientras que
ocho candidatos varones bordearon el 40%. En promedio, cada candidata mujer
obtuvo 30%, mientras que cada candidato varón obtuvo solo el 5%.
5.- CRISIS EN EL
APRA.
Otra constatación que
se puede observar en las presentes elecciones es una grave crisis del
APRA. Alan García, dos veces presidente, esta vez en alianza con el PPC,
sólo logra un magro 5.8%, es decir, logra pasar la valla electoral por décimas.
A nivel parlamentario, se asegura que el APRA no pasará de tener cinco
congresistas: tres en Lima, y dos en La Libertad.
Hay que señalar que
esta crisis del APRA, que al parecer supone el retiro de la política de Alan
García, no es producto de una mala campaña electoral, sino resultado de los dos
gobiernos de Alan García. Dos gobiernos caracterizados por notorios casos de
corrupción y delitos contra los derechos humanos lo han hundido, y el hecho que
ya ni en teoría es oposición al "status quo" no le han permitido
levantarse.
De su primer
gobierno, en cuanto al tema de la corrupción, vamos a referirnos a dos cosas: A
los "dólares MUC" y a los "créditos agrarios". Nadie
desconoce que la economía peruana durante el primer gobierno aprista estaba
totalmente dolarizada, es decir, todo se compraba en dólares. Los peruanos
comunes teníamos que comprar dólares en la calle, los apristas tenían acceso al
"dólar MUC". Ejemplo: si querías comprar un bien valorizado a mil
dólares (a cambio actual), y eras un peruano común, tenías que comprar dólares
en la calle o en un banco, a tres nuevos soles cada dolar, es decir, debías
invertir tres mil nuevos soles; pero un aprista carnetizado, tenía acceso a
comprar "dólares MUC" a un nuevo sol por dolar, es decir sólo
invertía mil nuevos soles. Así de fácil, con dólares baratos (cuya diferencia
de costo la pagábamos todos los peruanos) se enriquecían los apristas. En
cuanto a los créditos agrarios, se ofreció "préstamos a cero intereses a
los agricultores del país". Esto en la oferta publicitaria, pero en los
hechos, muchos campesinos no recibieron ni un cobre en tanto que muchos
apristas urbanos totalmente ajenos a la agricultura se beneficiaron con estos
créditos "en moneda nacional" (cada vez más devaluados) y "sin
intereses". El primer gobierno de Alan García fue un infierno para los
peruanos comunes pero fue el paraíso para los apristas. Y del primer gobierno
aprista no se puede olvidar, en relación a los derechos humanos, entre muchos
otros, de la masacre de los penales.
Alan García calificó
a estas canalladas de su primer gobierno como "errores" cometidos en
su juventud y pidió una segunda oportunidad. Pero su segundo gobierno no estuvo
libre de corrupción. De tantos casos vamos a referirnos a dos de ellos: A la
"reconstrucción de Pisco" y la liberación de narcos. Sobre la
"reconstrucción de Pisco". Muchas obras públicas del país fueron
paralizadas "porque sus fondos fueron transferidos para la reconstrucción
de Pisco". A esto hay que sumar grandes donaciones internacionales. Pese a
todo ese dineral Pisco no fue reconstruido. Y no se necesita ser mago para
saber que ese dinero fue a parar a las arcas de los apristas. En suma, los
apristas negociaron con el dolor ajeno. Esto es sencillamente inhumano e
imperdonable. En cuanto a la liberación de los narcos de alto vuelo, se dice
que se hizo "en nombre de Dios" y con criterios estrictamente
humanitarios, pero hay sobradas evidencias que fue a cambio de buenos fajos de
dólares. Este delito de corrupción es de por sí tan nauseabundo que nos
ahorramos mayores comentarios. Y en cuanto a derechos humanos en el segundo
período aprista, no puede pasar en alto la masacre de Bagua.
Si para los fiscales
y jueces apristas "no ha pasado nada" y Alan García es todo un
"monumento" a la impunidad, el electorado no piensa igual, lo a
castigado en las urnas, y lo ha reducido a su mínima expresión.
6.- ¿PERO POR QUÉ EL
PUEBLO PERUANO VOTÓ POR LA DERECHA?
Todo fenómeno es
producto de sus causas. La mayoritaria votación del pueblo peruano por la derecha
también tiene sus causas. En política, al igual que en otros asuntos, las masas
también se guían por sus experiencias. Hagamos un ensayo.
a) El factor
Barrantes.- En las elecciones generales de 1985, Alan García (APRA) y Alfonso
Barrantes (IU) pasaron a la segunda vuelta. Barrantes renunció a la segunda
vuelta. Mensaje al pueblo: La izquierda sólo quiere ser oposición, no quiere
ser gobierno. Ojo. Desde entonces la izquierda desapareció de la vitrina
electoral.
b) El factor sendero
luminoso.- Sendero luminoso aparece en el escenario nacional en las elecciones
generales de 1980, justamente dinamitando un local de votación. Luego, por
encargo de la CIA, tras la serie de atrocidades que cometía contra la población
rural, principalmente de Ayacucho, Huancavelica y Apurímac, dejaba la bandera
roja con la hoz y el martillo, con el objetivo de que la población asocie la
izquierda con terrorismo. Mensaje al pueblo: la izquierda es
terrorismo. Ojo. En las elecciones generales del 2006, Ollanta pierde las elecciones
acusado de terrorista.
c) El factor IU.- IU
llegó a ser gobierno en muchas municipalidades provinciales y distritales del
país. Con la excepción del magnífico gobierno municipal de don Daniel Estrada
en la Municipalidad Provincial del Cusco, no tuvo buena gestión en otras
localidades del país. Mensaje al pueblo: la izquierda tiene buenos ideales pero
no es buen gobierno. Esto en sí se debió a que cuando IU tenía ascendencia en
las masas, muchos arribistas se incorporaron a ella buscando su beneficio personal,
y conseguido ello se alejaron de sus filas, pero en mensaje que dejaron es que
la izquierda no es buen gobierno.
d) El factor
Fujimori.- En las elecciones generales de 1990, pasaron a la segunda vuelta
Vargas Llosa y Fujimori. Vargas Llosa proponía la necesidad de un shock para
salir de la hiperinflación imperante. Fujimori, sin mucho esfuerzo, con una
sonrisa ofrecía "no shock, no shock". Luego de ganar las elecciones,
lo primero que hizo su gobierno fue aplicar el denominado "fujishock",
un shock más drástico que lo propuesto por Vargas Llosa. Mensaje al pueblo: El
ganador gana ofreciendo un programa, y gobierna con otro programa. Los
programas electorales no se respetan.
e) El caso Toledo.-
En las elecciones generales de 2001, gana Toledo, el dirigente antifujimorista
más visible. Su gobierno fue una continuación del gobierno de Fujimori. Mensaje
al pueblo: Hay antifujimoristas que nada hacen contra el fujimorismo.
f) El factor
Villarán.- Susana Villarán ganó las elecciones municipales de 2010 a la
Municipalidad de Lima Metropolitana con la aureola de izquierdista. San Juan de
Lurigancho es el distrito más poblado de Lima, y uno de sus problemas más
graves es la congestión vehícular. El alcalde Castañeda dejó en ejecución
una obra fundamental para este distrito: dos túneles entre San Juan de
Lurigancho y el Rímac. Y a Susana Villarán le dio la bendita gana de no
culminar esta obra. Mensaje al pueblo: a la izquierda no le interesa los
problemas del pueblo.
g) El factor Humala.-
Tal vez Ollanta Humala nunca fue de izquierda, pero muchos trabajaron para
pintarlo de "zurdo". Su hermano Antauro publicaba un periódico de
oposición radical denominado "Ollanta". Muchos partidos de izquierda
lo encumbraban como "el candidato de la izquierda". En suma, Ollanta
en las elecciones del 2006 y 2011 fue visto como "el candidato de la
izquierda". No está demás señalar que en la primera vuelta de las
elecciones de 2011 ofreció un programa para "la gran transformación",
que entre otros puntos proponía una nueva Constitución, que abandonó para la
segunda vuelta. Mensaje al pueblo: Hay quienes dicen ser de izquierda pero son
de derecha. Al final, todos los candidatos son de derecha.
7.- ENTRE DOS
OPCIONES.-
En las últimas
elecciones, el pueblo peruano, con excepción de las elecciones generales de
1980 en la cual Belaúnde gana con el 45% de los votos válidos, (entonces no
había la segunda vuelta), y en elecciones generales de 1995 en el cual Fujimori
ganó las elecciones en primera vuelta con el 64% de los votos válidos, (superando
el 50%), se ha visto en la encrucijada de decidir, en segunda vuelta, entre dos
opciones. Repasemos.
a) 1985: García (45%)
- Barrantes (20%).- El mejor momento del APRA y de la izquierda en la historia
electoral del país. Los partidarios de Haya de la Torre y Mariátegui se iban a
enfrentar en segunda vuelta, pero inesperadamente renunció Barrantes
traicionando las inspiraciones de la izquierda y del pueblo peruano, y García
pasó a ser Presidente del Perú. Dos apuntes: a) Si Imaginamos que pasaría hoy
día si Verónica Mendoza pasa a segunda vuelta y renuncia a su candidatura,
tendríamos una idea de todo lo que pasó aquel momento. b) En este cómodo
triunfo del APRA, ya funcionaba, y muy bien, la errónea e interesada versión
que "la izquierda es terrorismo".
b) 1990: Vargas
Llosa (32%) - Fujimori (29%).- En estas elecciones Vargas Llosa proponía un
shock, y Fujimori, proponía "no shock". El pueblo peruano votó por el
"no shock". Pese a ello, se terminó aplicando un shock. Es que no bastaba
votar contra el shock, había que luchar contra el shock, y el pueblo peruano no
estaba preparado para esa dura jornada.
c) 2000: Fujimori (49%) - Toledo (40%).- Fujimori
proponía continuar la lucha contra el terrorismo y mantener sus programas
asistencialistas. Toledo, con el apoyo de la izquierda, proponía poner un alto
al autoritarismo fujimorista. Ganó Fujimori. Es de observar la importancia para
nuestra población el factor "lucha contra el terrorismo".
d) 2001: Toledo (36%) - García (25%).- En estas
elecciones se enfrentaban el dirigente “antifujimorista” más visible y un ex
presidente que había tenido un pésimo gobierno. En el papel Toledo era "el
mal menor", y ganó las elecciones. Hay que remarcar que Toledo, supuesto
antifujimorista, gobernó aplicando rigurosamente la Constitución fujimorista.
e) 2006: Humala
(30%) - García (24%).- En el papel se enfrentaban el izquierdista Humala y el
aprista García. Se enfrentaban un militar "progresista" nuevo y un
fracasado presidente aprista. El APRA recurrió a la fórmula de acusar a la
izquierda de terrorismo. El pueblo peruano se puso en una grave disyuntiva: o
retorno de la hiperinflación, o retorno del terrorismo. Y en unas de las
elecciones más duras de toda su historia, optó por el retorno de la
hiperinflación. Esta elección en verdad fue tan difícil, que más de uno ha
confesado que se persignó antes de emitir su voto. Esta elección grafica el
alto temor del pueblo al terroismo.
8.- ¿POR QUIÉN DEBE
VOTAR LA IZQUIERDA EN ESTA SEGUNDA VUELTA?
En las elecciones de
1990, la izquierda, en su mayoría, sin duda ni murmuraciones votó por el
"no shock" ofrecido por Fujimori contra el shock propuesto por Vargas
Llosa. En las elecciones de 2001, la izquierda, en su mayoría, votó por Toledo,
nuevo candidato, contra García, un ex presidente con un pésimo gobierno. En las
elecciones de 2006 votó por Humala, supuesto izquierdista, contra el aprista
García. Y en las elecciones de 2011 votó por Humala que hablaba de
transformación contra Keiko que representaba el autoritarismo y la corrupción.
Ahora, entre Keiko
Fujimori Higuchi y Pedro Pablo Kuczynski, ¿por quién debería votar? Ambos son
de derecha. Ambos son de origen extranjero. Ambos, hasta racialmente son
diferentes a la mayoría de peruanos y peruanas.
Es indudable que uno
de ellos será el presidente o la presidenta del Perú. El pueblo peruano que
decida quién debe ser su próximo tirano o tirana, pero la izquierda histórica
no tiene porqué contaminarse en esta inhumana decisión. La izquierda histórica
no puede votar por ninguno de ellos. La izquierda histórica tiene que rechazar
a ambos como se hizo contra Vargas Llosa y Fujimori en 1990. No podemos seguir
empantanados, desde 1990, en el cuento de "el mal menor". Se hace
imperativo el voto en blanco o viciado. Que ninguno de los dos llegue al
gobierno con el apoyo de la izquierda. Que la izquierda les notifique, que
ambos son sus enemigos de clase y cualquiera será combatido por igual en la
lucha por los sagrados intereses de los trabajadores y la patria. La tarea de
los izquierdistas peruanos es encabezar las luchas de los trabajadores y el
pueblo, y seguir acrecentando y fortaleciendo a la izquierda en el Perú.
Votar por la derecha,
cualquiera sea su matiz, es votar por es sistema económico político de la
burguesía, es votar por la continuación de la cruel explotación del capitalismo
a la clase obrera. La clase obrera jamás tendrá un futuro promisorio bajo el
capitalismo, sino sólo un salario de hambre y una vida miserable. Pero el
capitalismo no solo explota a la clase obrera, sino también le roba sus
recursos naturales al país. En el centro del Perú no podemos olvidar la negra
época de la Cerro de Pasco Cooper Corporation, antes, y de la Doe Run,
últimamente, responsable de la actual agonía de La Oroya. También es parte del
capitalismo los sucios negociados que alctualmente hay con el gas de Camisea.
Por ello, la izquierda histórica no puede votar por ningún partido de la
derecha, por ningún partido de la burguesía. No puede votar, bajo el supuesto
de "votar por el mal menor" , por ninguno de sus enemigos de clase,
que buscan el poder para seguir aplastando a la clase obrera y al país sin
piedad. La derecha va a gobernarnos cinco años más, pero que no sea con
nuestros votos y nuestra aceptación, sino, expresémosle en las urnas y en las
calles nuestro total rechazo y nuestra firme oposición.
Mayo del 2016